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Cualquier tema entra mejor con comida y eso hacemos en Casa Cavestany, comer, de vez en cuando hablar y cuando tenemos la boca llena lo suplimos con esos hits atemporales que tenias enterrados bajo siete candados en lo más profundo de tu estómago.
En cada programa nos vistan amigos, invitados especiales y amigos que a su vez son invitados especiales atraídos por los cantos de sirena que producen los torreznos y el licor de café. “Un podcast que ni canta, ni baila, pero no se lo pierdan”.
Y si eres más de audio, también está disponible en todas las plataformas ¡pincha aqui!
En esta ocasión disfrutamos de un cocido madrileño en tres vuelcos, en compañía de dos gatos de pro, Antonio Bartrina (Madrid, 1957) y Dionisio Rodríguez “El Dioni” (Madrid, 1949), pero cuyas historias, se puede decir que, están vinculadas al otro lado del charco.
Antonio creó en 1984 -y en plena Movida Madrileña- Malevaje, un grupo exclusivamente para hacer tangos. Acompañado de algunos de los músicos más importantes del momento, y con lo que comenzó casi como una anécdota, llevan más de una decena de discos a sus espaldas, siempre fieles a su estilo, y con una legión de fans a ambos lados del Atlántico.
Sus giras son permanentes y sus conciertos memorables. Si pasan por tu ciudad, no dejes de ir a verlos y sentirte como si te perdieras en la noche, entre el humo y las copas de un boliche porteño.
Por su parte, El Dioni se instaló, además de en los papeles y las pantallas, en los corazones de muchos españoles cuando en julio de 1989 decidió salir pitando con el furgón blindado de la empresa de vigilancia para la que trabajaba, y que estaba cargado de muchos millones de las antiguas pesetas.
Disfrutó de 8 trepidantes meses entre Brasil, Paraguay, Argentina…, viviéndolos y disfrutándolos como el millonario en el que, de golpe y porrazo, se había convertido.
Pagada la deuda con su estancia en prisión, ¿Volvería a hacerlo…?. Para saberlo, no tienes más que ponerte el programa.
¡Esto y mucho más en esta nueva entrega de Casa Cavestany!